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Nuria Antón Airún

 




La vida es una danza que arrastra sus raíces por todas las moquetas.
Deja que la música te lleve y acaricie tu cintura como un experto amante.

Trae contigo la lluvia y el granizo,
pero haz que vuele la cometa.

De la soledad de una rosa
solo el viento conoce los motivos.

LAS ORILLAS DEL BERNSEGA

Las orillas del Bernesga
se parecen al asfalto de las calles de Manhattan
cuando el río va descalzo.
La espera es como el tiempo de sequía;
se puede ver el cauce desgastado
y las horas mezclándose en el lodo.
Recuerdo el río jugando entre las piedras
y los peces escondiéndose en sus pozos.
Ahora,
el tiempo se entretiene
recorriendo los pasillos de fríos hospitales
mientras yo, en la orilla,
soy el pez que boquea
con los labios
atrapados en su anzuelo.

LA DIFERENCIA ENTRE TÚ Y YO

La diferencia entre tú y yo
no está en el vuelo ni en la rama;
ni siquiera en los anillos
que dicen saber la edad de la corteza.
La diferencia entre tú y yo,
tal vez, no existe
o no es necesaria.
Hablemos, mejor,
de similitudes.
Acerca tus alas.

PLATOS AUSENTES

Cada año es más corto el larguero en la mesa;
brillan menos las luces y la estrella del árbol.
Han brindado en silencio nuestras copas de cava
por las sillas vacías y los platos ausentes.
Cada año se agria el turrón y los dulces
y se seca el abeto, el acebo y las uvas.
Va perdiendo el sonido nuestra vieja zambomba
y se hace vinagre el sabor del buen vino.
Cada año es más viejo mi querido Rey Mago
mas no cierra sus manos ni caduca su magia.
Cada noche de Reyes deposita en mis botas
el calor de un abrazo con sus manos de niño.
Cada año que pasa me pesa en los huesos
el sabor de la ausencia y el deseo de veros.

NADA AVALA EL VUELO DE UN PÁJARO

Nada avala el vuelo de un pájaro
cuando la nieve cae sobre sus alas
pero el ave sobrevive al viento como el río a la sequía
o el pasto al ganado.
Nada avala su trino
pero el canto permanece
a pesar del invierno.
No hay vuelo ni trinos
en el mercado de esencias porque nunca hubo fronteras que alimentaran a un pájaro.
Nada avala el vuelo;
nada retiene el canto,
nada.

NADIE MIRA EL COLOR DE LOS TEJADOS

Nadie mira el color de los tejados
solo importa que la casa esté a salvo
Las goteras
¡qué importan las goteras!
si todo está seguro.
Tejado...
demasiado ruido debajo de las tejas.

QUÉ TENDRÁN LAS TARDES DE DOMINGO

Que tendrán las tardes de domingo
que no quieren que el lunes amanezca.
Será que la rutina vuelve al juicio la resaca
y el instante se vuelve más preciso.
Recibo el duelo como premio a los errores cometidos
y dejo correr el agua.
Vengo de un lugar llamado Edén;
me llamo Eva.

DE PUNTILLAS

Ella es silenciosa y de puntillas.
Ningún ruido sale
de sus manos laboriosas.
Teje, cose y lava todo el día
y recibe como premio algún portazo.
Si los golpes acontecen por la noche
hay disculpa
“el alcohol es responsable”;
qué más da si el carmín cubre los golpes
y las gafas pueden ser aún más grandes.
Los vecinos la saludan a escondidas
el tendero pone miel entre su compra
pero nada endulza
la sal en sus mejillas
y los saludos no reviven a las víctimas.

QUÉ PÉRDIDA DE TIEMPO ES OLVIDAR

Qué pérdida de tiempo es olvidar'
Restarle tiempo al tiempo
es caer en el vacío.
Rechazo esta palabra
y sustituyo olvido por recuerdo.
Y luego tú decides:
puedes recordar
o restarle tiempo al tiempo
y guardar el resultado en un cajón
que debió llamarse olvido.

SI HAY UNA FELICIDAD…

Si hay una felicidad está en este horizonte
o en los rincones donde tú me habitas.
Añil y encinas entre páramos yermos
y ojos verdes
que se pierden en el valle.
Si hay una luz está
entre dos sombras
que llenan todos los vacíos.

DIBUJAR SONRISAS

Dibujar sonrisas.
Sí, dibujar sonrisas en la nieve
como si el calor de un beso pudiera derretirlo todo.
¿De qué sirve enfadarse ante el mal tiempo?
No hay virtud que no de sombra a un defecto,
como no sabe de lo sano
quien no conoce el dolor.
La gravedad nos atrae por nuestro propio peso.
Divagaciones

RECUERDO CON TERNURA AQUELLA INFANCIA

Recuerdo con ternura aquella infancia,
los juegos, las canicas, las muñecas;
las horas no tenían importancia,
hilábamos los sueños en las ruecas.
Mirándome al espejo, en la distancia
aún veo aquella niña con sus pecas;
feliz adolescente en la ignorancia
que sigue persiguiendo hojas secas.
No quiero que me imponga el calendario
esferas de cristal sobre horas muertas;
no quiero vigilar ningún rosario
ni ser el minutero de sus huertas.
El tiempo es un invento imaginario
que rige nuestras vidas tras las puertas.

TUS MANOS HABLAN DE SIGNOS

Tus manos hablan de signos
como chamanes que siembran el trigo
en las sabanas de África
pero hay ídolos de barro enredados en tu pelo.
Imagino otras vidas a través del espejo que refleja tu rostro
pero no veo tu imagen traducida al lenguaje de los labios.
La pica rota
y yo
indefensa ante el asta del toro.
No hay nada extraño
en el llanto
de un recién nacido.

HE VISTO PASAR LOS AÑOS

He visto pasar los años
a través de las vidrieras
y la gótica figura
de la Pulchra Leonina.
Su
s arcos apuntados
son mudos centinelas de la Historia
que ha quedado grabada
para siempre en mi retina.
El tañer de las campanas
aún me sigue recordando
aquel timbre que anunciaba
el final de cada clase.
Las calles empedradas
son testigo de un desfile de estudiantes
que cruzaban la antigua Legio VII
camino de la escuela.
Las murallas daban sombra en el patio del colegio
y el tiempo dormitaba entre las piedras de sus muros.
El pupitre era el cofre del tesoro
que escondía los pinceles
y las gomas de borrar.
Yo,
dibujaba en blanco y negro el arco iris
y pintaba de colores
los días de aguacero.
Eran gigantes los molinos
y en sus aspas se enredaba la ilusión
de un coro
de pequeñas Dulcineas sin Quijote
que hilvanaban sus sueños
a la sombra de los muros
de aquel patio del colegio.

A MENUDO ME PREGUNTO

A menudo me pregunto
sin esperar, acaso, la respuesta
y dispongo las piezas sobre el tablero
el alfil, la torre, el rey y la reina.
A menudo me pregunto
si importa, en realidad, el color de las piezas;
si es relevante quién hace el primer movimiento
escoltado por caballos y peones.
No sé si debí cambiar el alfil por la reina;
si merece la pena sacrificar la torre
para ganar el juego…
Me pregunto
cómo será el siguiente movimiento;
si es certero seguir en diagonal
o, tal vez, deba seguir en línea recta.
A menudo
A menudo me pregunto
¿qué es lo importante?
La verdad, es que no lo sé.
Olvidé las reglas del juego
y no sé dónde guardé las instrucciones.

CUARENTA Y TRES PRIMAVERAS

Cuarenta y tres primaveras
y el tallo no le ha crecido;
parece que las espinas
no se clavan en sus flores.
Pero también a una amapola
se le ahogan las raíces.

PARA QUIEN MÁS LO MERECE

Para quien más lo merece:

Abandono la paz del líquido amniótico
y un río de sal brota de mis ojos.

La calle está fría y no hay direcciones,
tan solo el instinto.

Mis manos pequeñas buscan, a tientas
sus cálidos pechos.

Sus brazos me acunan
y ahuyentan mis miedos.

Ella es mi origen,
Mi luz y mi guía.

Que nunca me falte.

HE CONSTRUIDO UN MUNDO DE SÍLABAS DESORDENADAS

He construido un mundo de sílabas desordenadas,
donde no cabe el silencio.
Limita al Norte con tus labios y al Sur con tus caricias.
Las nubes se han quedado fuera de nuestras fronteras
porque sólo queda espacio para momentos felices.
En el Este habita la brisa
que lleva tus manos a mis rincones prohibidos,
donde juega el amor al resguardo del frío.
Conservo intacto el Oeste, para atardecer contigo
y ver como asoma la luna en tu cara,
mientras tus ojos se enredan en mi pelo,
y mi boca se pierde en tu risa.
Y es que no quiero vivir más a la intemperie;
voy a echar raíces en tu alma
y construir un mundo
lleno de sonrisas y besos.
Tengo en mi mundo
una pluma que sólo sabe escribir:
Te quiero para toda la vida.

TUS LABIOS

Me he quedado dormida en la sonrisa
que se arquea como una cuna para arroparme.
Suavemente me tapa otro labio,
susurra un beso para que me duerma.
Desperté colgada de una de tus pestañas
llegué allí en un bostezo.
Vi el infinito en tu gris azulado,
profunda paz,
aire nuevo.
Estornuda,
y vuelo,
su mano como cuenco de leche
me recoge,
me salva,
y con un nuevo beso
me devuelve a la cuna de sus labios.

AÚN QUEDAN AMAPOLAS QUE NO NECESITAN ORNAMENTO

Aun quedan amapolas que no necesitan ornamento
y lilas que regalan su olor
sin pedir nada a cambio.

ORÍGENES

He vuelto al origen de un mundo
que se ha vuelto complicado.
He vuelto a los principios,
cuando las manos
eran las poleas de la historia.
He vuelto…
a la oxidada raíz de la natura
y recupero la esencia primigenia de la vida
modelando la arcilla de mis sueños
con la arcaica memoria de mis manos.

EL HOMBRE QUE ADMIRO

El hombre que admiro,
no viste de traje, ni lleva corbata.
No exhibe su porte, ni mide su talle.
El hombre que admiro
firma sus versos en un pergamino
que curte de noche.
El hombre que admiro
me baja la luna
y deja en mi almohada
rosas talladas en plata.

HE ESTADO EN LA LUNA

He estado en la luna
y he mirado las estrellas.
He bajado a la tierra,
Y allí estabas tu,
esperando que te hablara de ellas.
Como siempre,
los brazos abiertos,
y en tus ojos...
mil lunas llenas.

SOLO QUIERO SER TU LUNA

Para hablarte en silencio de mis sueños
tan solo pluma y tinta necesito.
inventarte en un verso cada noche.
y dentro de un poema darte vida.
Para ver, sin mirar, tus ojos negros,
invento nuevos rostros en tu cara,
dibujo tus pupilas en un lienzo
pero solo yo puedo descifrarlas.
Para quererte a ciegas, sin recelos
solo tengo que oír tu voz profunda
que susurra baladas en mi oído
mientras meces mi cuerpo en una danza.
Yo quiero ser tu luna cada noche
y que seas mi sol cada mañana.

HE SEMBRADO EL CAMINO…

He sembrado el camino de luciérnagas por si vuelves.
Hay flores frescas a la entrada,
y risas en la cocina.
Las llaves están donde siempre.
Te dejo la luz encendida.

ATERRIZA EN MIS MANOS UN SUEÑO

Aterriza en mis manos un sueño
se rompe la magia
el globo de helio que lo hacía volar.
Aterriza un sueño,
desaparece el embrujo
y el sueño se convierte en realidad
¿o vivo en un sueño?
Aterriza un sueño-
Pongo el corazón en una mano
y en la otra la razón,
como en una balanza.
Y decido:
corazón,
norte,
o locura.

SOY UNA RAIZ LLENA DE VIDA

(Quiero dedicar este poema a Ramón Collado, una gran persona y gran médico, fallecido a la temprana edad de sesenta y cuatro años porque gracias a él.... yo soy vida. (D.E.P.)

Soy una raíz llena de vida.
¡VIDA!.
Si, con mayúsculas.
Y como raíz viva que soy:
salto, corro, río, amo, beso…
Y te beso ardientemente,
como hay que besar, sin miedo.
Sin miedo a que mañana no quieras besarme.
Porque…
hoy estoy viva,
viva para crecer,
viva para soñar,
viva para amar…
Y amarte….
es lo mejor que me ha pasado en la vida.

LA CAMA ESTÁ VACÍA

La cama está vacía.

Las sábanas ya no se enarbolan
formando espuma como las olas del mar.

La brisa ha dejado de acunar las cortinas.
Ya no se inventan días
sobre las brasas del fuego.

No amedrenta el sueño
los copos de nieve que cubre los campos

Y las ventanas sueñan primaveras
que olviden la nostalgia del invierno.

Pero chirrían las bisagras
cuando mirando al horizonte,
lo único que se ve
es un páramo inmenso.

SI YO SOY UNA CARIÁTIDE

Si yo soy una cariátide
bajo la arcada que guarda
la cúpula del mundo,
tú eres la planta de cruz latina,
que soporta la catedral donde yo existo.

COMO UN LIBRO RECIÉN ENCUADRNADO

Como un libro recién encuadernado
van pasando las horas de mi vida
y se juntan las flechas del pasado
cerrando cicatrices en mi herida
Dibujando futuros universos
se borró nuestro ayer de la memoria
e imprimiendo con sangre aquellos versos
desterró su silencio de esta historia.
La tinta que guardaba mi laguna
hoy refresca el bordón de mi guitarra;
cantando soleares a la luna
el alma más gitana se desgarra.
Hay canciones con letras desgastadas
que mienten bajo notas olvidadas.

ALGÚN DÍA VOLVERÉ A SER FUEGO

Algún día volveré a ser fuego
quemaré mis naves, mi nombre
y la piel no se adherirá al cuerpo.
Algún día mis zapatos serán
polvo del camino,
mis ojos horizonte,
y mis manos tierra.
Algún día mi alma será pluma.
Algún día…
algún día,
seré luna.

AL FINAL DEL CAMINO

Al final del camino,
de todos los caminos,
la luz lleva al silencio.
Hay telarañas en el reloj
y la lluvia oxida el tiempo.
Arranco hojas al otoño,
el calendario no se detiene.
Hay cuarenta y tres soles
en mi vida y no se puede
amanecer otra vez desde cero.

PASADO (de “Versos encendidos”)

Me vuelvo huella
para seguir tu camino
y estela de mar
para navegar junto a tu barco.
Me vuelvo sirena en noches de tormenta,
para asomarme al mástil más alto,
donde estallan las olas junto a tu rostro
como pompas de jabón
en la palma de la mano.
Allí donde la espuma de tu mar
sabe a cilantro,
néctar de amargos recuerdos,
sólo quedan los restos de fotos amarillas,
naufragio de recuerdos.
Me vuelvo hiedra para trepar al balcón del ayer.
Para respirar tu esencia
y en  el rocío de tus caducas hojas
enredar mis manos
en las noche de luna llena…”
 
A TI

A ti
que fuiste el héroe de mis noches de insomnio,
que ahuyentabas cocodrilos en la noche
con tus ojos de gato.
A ti que cubriste de barro mi corteza
que regaste mis raíces;
a ti que dedicaste tu tiempo de ocio a enseñarme el color del invierno.
A ti que me enseñaste a volar,
a quemarme sin tocar el fuego .
A ti
que tantos desvelos te han causado mis dudas.
a ti
por ser siempre tú
y ser parte de mi.
A ti, papá, muchas felicidades.

PARAISO DE RASO

Apoyo mi cabeza entre tu hombro
y mis sueños.
Es tu voz la que acaricia mis sentidos.
Miro el mapa 
dibujado con mis dedos en tu pecho
mientras tú 
arañas horizontes en mi espalda.
Tu marea ha chocado con mi orilla;
mi costa se ha rendido a tu abordaje.
El resto
es nuestro paraíso 
envuelto por sábanas de raso.







1 comentario:

  1. mariajose castro11 de mayo de 2016, 1:23

    Preciosos versos y preciosamente descritos pensamientos y sentimientos. Los firmaria como propios porq los he sentido muy identificados con mi estilo y modo de escribir.

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