Sal ahí fuera,
a dar envidia a las flores,
a acaparar miradas extrañas,
a robar sonrisas incontroladas,
a cubrir de aroma sus mundos vacíos,
a llenar de sueños sus camas,
a devolver el latido a sus corazones.
Sal ahí fuera, pero antes,
olvídate de mí.
flores sobre una tumba,
lo dicen por mí.
juega siempre con todos,
perverso Tiempo.
definitivamente,
no sabe estar callada.
que para poder sonreír,
cierro los ojos.
mis manos anudan un abrazo vacío,
mi silencio se llena de tu esencia
y dos lágrimas bañan en mis labios
la ausencia de los tuyos.
solo encuentra abrigo
bajo tu mirada?
recuerdos de un pasado
de barco hundido.
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