Páginas

Cris Anacorito

 
Sal ahí fuera,
a dar envidia a las flores,
a acaparar miradas extrañas,
a robar sonrisas incontroladas,
a cubrir de aroma sus mundos vacíos,
a llenar de sueños sus camas,
a devolver el latido a sus corazones.
Sal ahí fuera, pero antes,
olvídate de mí.
 
 
Todo lo que siento,
flores sobre una tumba,
lo dicen por mí.
 
Amigo de nadie,
juega siempre con todos,
perverso Tiempo.
 
Tu mirada,
definitivamente,
no sabe estar callada.
 
Hace ya tiempo,
que para poder sonreír,
cierro los ojos.
 
Mis ojos se cierran buscándote,
mis manos anudan un abrazo vacío,
mi silencio se llena de tu esencia
y dos lágrimas bañan en mis labios
la ausencia de los tuyos.
 
 
Por qué este frío mío
solo encuentra abrigo
bajo tu mirada?
 
 
Soñar con mares
recuerdos de un pasado
de barco hundido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario